Forjadas en Sanjo, Niigata, Japón, estas pinzas de acero al carbono proporcionan un agarre firme y texturizado para pelar fibras y dar forma a las características de la madera muerta envejecida.
El equilibrio y la forma de la mandíbula te ayudan a aplicar la fuerza con precisión, respetando las venas vivas mientras refinas el jin y el shari.